M.

Atrás queda una propuesta refundacional, divisoria, ambigua y oscurantista, que no representa el querer ni el sentir del pueblo chileno, pueblo que busca en su conjunto caminante, realidades que apunten a definir acuerdos nacionales, claridades en su andar democrático hacia la unidad; mayor entendimiento, paz y crecimiento, donde todos los chilenos nos sintamos representados por una verdadera constitución, que señale seguridad, estreche nuestra rica historicidad en el forjamiento patrio con sus valores y diversas tradiciones; haciéndolo así más fructífero con mayor bienestar de salud, educación; su andar en el aspecto sociocultural, económico y naturaleza; instando de lleno, a la hermanable relación y convivencia en todo nuestro hermoso país, que Dios Padre nos ha dado en el extremo austral del mundo. ¡Viva Chile!!!