martes, 2 de octubre de 2018
lunes, 1 de octubre de 2018
Rayos de primavera
La primavera va señalando sus brotes; sus auroras de regocijo pincelando jardines y huertos; y la primavera va realzando tu andar, tu pelo libre al viento con el fulgor de tu silueta, con el fulgor de las estrellas; que tocan las alas de este sentimiento de amor por ti, de amor por ti; y vibran las horas del día y el nocturno carmesí; enterneciendo caminos, enterneciendo portales del silencio; y la primavera es mi primavera con la llamarada de sus hojas, con tus encantos de mujer enamorada al solaz de un te quiero, al solaz de abrazarte entre sus rayos apasionados y senderos de amor al cielo.
Mar (Caudal chileno)
Vuelvo a estremecerme en tus sinuosas rocas y en tus caletas primorosas; mis olas con el azul de tu cielo, y remadores al Divino.¡Oh, litoral chileno, paisaje de cálidos sellos! Mi espuma a sol de aliento, y luna enamorada; mis aguas nutriendo tus pueblos. Maullín, Tirúa, Antofagasta, o en el umbral magallánico; día a día en mis albores con la médula de sus semblantes; y es que yo siempre a ti, larguísima belleza, siempre al afán de tus puertos y playas, al portal de tus cocinas poblacionales, al rincón del fiordo lejano y al pescador de eternidades.
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