sábado, 18 de noviembre de 2017

Cordillera

Ondular de ígneas rocas en alpacas y flamencos; y aleteando Isluga, Las Vicuñas, Lauca, en el memorial de mis alturas. Vuela el cóndor asiduo de araucarias, quebradas, luces pétreas; y laten hondo mis albos pétalos de sempiternos caminantes; añoranzas del huemul y el respirar de alerces. Bajan y bajan las aguas de mi pecho estrechando amaneceres y el estelar de mis laderas. ¡Chile lindo! a brote de escuela, y un sonreír entre mis ramas; vuelvo a renacer tus pasos y tonadas del querer, que dieron miel entre mis brazos y ya son eco en mis volcanes. (Caudal chileno)

viernes, 17 de noviembre de 2017

Paisajes del viento

El viento asoma con sus alas de plata. Los tonos de su aurora, traen lejanas calles de voces y guitarras por donde ayer anduve con abriles y llamas de sueños. Pero ahora el viento, este viento y su paisaje que va tocando los cristales, luce nuevos bríos con la mar imperante y la sal del camino; y en sus ramas luminosas, se alzan intensas las horas con nuevas calles y trinos, que en sus marcos navegantes, esbozan también un querer y un verdor al infinito.

jueves, 16 de noviembre de 2017

Palpitar andino

Allá en la cordillera venido de Sierra Nevada, conocí tu alma ígnea y tu pecho volcánico; espacio de águilas lejanas, quebradas y ríos implacables. Es la historia de sangre abrupta en la niñez de nieve intrépida y el acerado tren del sustento por el túnel Las Raíces, el más sudado, el más andino de América. ¡Cordillera, cordillera de roqueríos inmensos, rugido de pumas y empinados chivos, esplendor de copihues y araucarias, parte de este Chile querido!¡Cómo lucha su gente y palpitan Captrén y Gualletue, también la Princesa y el Indio, y los cráteres de los volcanes! Animado llevo tu paisaje y aquellos andares familiares; cordillera de la mano Divina de frescor saludable, vas dichosa y reluciente por mis venas emocionales. (Cascada otoñal)

miércoles, 15 de noviembre de 2017

...cuando en la alta roca el anillo, cuando el eco en un febrero... cuando el arroyo en tu faz; y tu ajuar por la línea férrea.(Acordes de luna)